lunes, 15 de abril de 2013




Segunda parte... Mujer de 74 años

A pesar de sólo llevarse once años la mujer anterior y ésta tienen muchas diferencias a la hora de su experiencia en la escuela. 

Esta mujer de 74 años fue a una escuela particular a los 12 años. Esta escuela particular no era sino la casa de la misma profesora, un salón dentro de esa casa. El sitio tenía unas sillas y unas tablas sujetadas por los laterales, muchas veces según nos cuenta la tabla se caían y acaban todas en el suelo. Por supuesto, la clase era solo de niñas y tenían que llevar uniforme. Al llegar a clase todos los días, debían ponerse de pie y rezar antes de empezar. La profesora que le daba clase se llamaba Doña Mérida tenía la cara finita y el pelo rubio; y al contrario que la anterior señora, esta señora sólo guarda malos recuerdos de la profesora. Se acuerda de las muchas formas de arrestar que tenía la profesora y que le producían que llegara a casa todos los días con las rodillas y las manos moradas. 

La profesora le daba golpes con la regla en las manos, le ponía de rodillas encima de unas piedras o millos con los libros en la cabeza e incluso le ponía esparadrapo en la boca para que no hablara. Debido a toda la clase de castigos que le imponía iba atemorizada a clase e incluso llegó a hacerse sus necesidades encima. En este colegio la obligaban a aprender a coser para lo que dedicaban media hora al día. 

También al igual que en el otro caso usaban cartillas a la hora de dar las clases pero esta señora no paso ni la primera.Esta circunstancia de no pasar ni la primera cartilla según nos relata pudo ser debido a su gran miedo de acudir a las clases. Debido a que no avanzaba en las clases, que la escuela era pagada por los padres y que la necesitaban en casa para el cuidado de sus hermanos la quitaron de la escuela ese mismo año sin ni siquiera saber escribir su nombre. 

Una vez con 19 años, antes de casarse, el ayuntamiento la obligó a volver al colegio para que aunque sea aprendiese a escribir su nombre, y así lo hizo. En esta escuela tampoco duró mucho tiempo debido a que se casó y comenzó a tener hijos, por lo que, debía cuidarlos, encargarse de las cosas de la casa y de la huerta.

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